Qué son las cookies
Las cookies son pequeños archivos
de texto que se almacenan en el equipo del usuario (ordenador, móvil o tablet) cuando
este visita algunos sitios web (no todas las webs utilizan cookies). En estos
archivos se almacenan datos sobre el visitante y sobre sus preferencias de
navegación que podrán ser actualizados y recuperados por la empresa o entidad
responsable de haberlos instalado.
Suelen utilizarse las cookies
para guardar datos personales como nombre y dirección, el contenido de la cesta
de la compra, rutas y tiempos de navegación, etc. Las cookies permiten que las
webs personalicen la experiencia del usuario y le sirvan el contenido
específico que busca. Además, son parte indispensable de la publicidad en
Internet: hacen posible a las empresas mostrar anuncios en función de los
hábitos de navegación de los consumidores.
Qué tipos de cookies existen
Hay una serie de categorías que
se suelen utilizar para describir cada tipo de cookie. No obstante, ten en
cuenta que habrá cookies que encajen en más de una categoría al mismo tiempo.
Existen 3 categorías de cookies:
1. Según la entidad que
las gestione, las cookies pueden ser propias o de terceros.
- Serán cookies propias si eres tú
mismo, el propietario de la web visitada, quien gestiona las cookies.
- Serán cookies de terceros si se
envían al terminal del usuario desde un dominio que no es el visitado, por
ejemplo: si tienes un botón de Me gusta en tu web que almacena una cookie
en el ordenador de tu visitante, Facebook podrá después acceder a ella
para identificarlo y revisar qué otras webs ha visto.
2. Según el tiempo que
duran activas, las cookies pueden ser de sesión o persistentes.
- Serán cookies de sesión si
solamente almacenan datos mientras el usuario está en tu web. Por ejemplo,
se utilizan cookies de sesión en los ecommerce (tiendas virtuales) para
recordar los productos que el cliente ha añadido a su cesta de la compra (de
otro modo, el sitio web se habría “olvidado” para cuando la visita
quisiera hacer check-out).
- Serán cookies persistentes si se
almacenan en el equipo del usuario durante un periodo tiempo después de la
visita (sean minutos o años, no importa). Un ejemplo de cookie
persistente: imagina que tu web está en diferentes idiomas y durante su
primera visita un usuario decide que quiere ver el contenido en español;
cuando vuelva a visitarte más adelante, la cookie persistente se asegurará
de que el idioma sea directamente el español, sin que el usuario tenga que
volver a especificarlo.
3. Según su finalidad,
las cookies pueden ser técnicas, de personalización, de
análisis o publicitarias.
- Serán cookies técnicas si son
necesarias para el correcto funcionamiento de tu sitio web y la provisión
de los servicios que ofreces en él. Por ejemplo, son cookies técnicas las
que sirven para identificar la sesión y mantenerla activa, las que
recuerdan los productos que incluye un pedido, las que utilizan elementos
de seguridad durante la navegación…
- Serán cookies de personalización si
existen para permitir que el usuario escoja sus preferencias. Por ejemplo,
el idioma en el que quiere ver el sitio web, la configuración regional,
etc.
- Las cookies de análisis sirven
para que, como propietario del sitio, analices el comportamiento de tus
visitantes. Por ejemplo, las cookies analíticas te
permiten medir desde qué zonas geográficas te visitan más, qué productos
reciben más visitas, qué posts se leen durante más tiempo, etc.
- Serán cookies publicitarias si te
ayudan a gestionar los espacios publicitarios que puedas haber incluido en
tu web. Son cookies que guardan información sobre los usuarios en función
de su historial de navegación para así poder mostrarles publicidad
orientada específicamente a sus intereses.